Leer la bola
¿Cuántas veces has escuchado esta expresión en nuestro deporte y aún no sabes exactamente a que se refiere? Pues bien, vamos a explicarlo lo más sencillo posible para que ahora cuando lo oigas sepas exactamente que quiere decir y tomar consciencia de su vital importancia y así poder mejorar vuestro nivel de juego.
Los entrenadores llamamos lectura de bola al aprendizaje de la trayectoria y el rebote que la bola tendrá en los cristales/paredes y también en aquellos golpeos en los que no intervienen paredes pero una lectura rápida, una anticipación y una ejecución adecuada a la situación de juego, puede hacernos tomar la iniciativa o finalizar el punto.
Para comenzar tenemos que partir de algo fundamental. Para poder leer bien la bola debemos estar siempre bien situados en la pista: un metro detrás de la línea de fondo y centrados en nuestro cuadro ( cuando jugamos en el fondo ) y aproximadamente a dos metros de la red y ligeramente orientados hacia donde este la bola ( cuando juguemos en la red ).
Si nuestra colocación no es buena, la visualización de la trayectoria siempre la haremos desde distintos puntos, con lo cual no podremos “mecanizar” a nuestro ojo, y estar bien orientados y predispuestos para el posterior golpeo. Por lo tanto una colocación correcta tanto en el fondo como en la red, bajará el nivel de ansiedad e incertidumbre ya que nos sentiremos más cómodos y por lo tanto facilitará el aprendizaje y la asimilación de la lectura de bola.
Aunque se aprende a leer la bola tanto jugando como viendo mucho pádel, a la hora de coger la pala, no hay duda alguna en que para acelerar este aprendizaje nos ayudará recibir algunas clases de mano de un entrenador cualificado, porque al lanzarnos muchas bolas que harán los mismos rebotes, mediante la repetición, conseguiremos nuestro objetivo en menor tiempo.
El pádel es un deporte en el que existen muchas variables en juego, desde la técnica, la estrategia, la motivación, la activación, hasta la lectura de bola y muchas más. Esto implica que el jugador para avanzar tiene varios campos relacionados entre sí y que sólo tienen sentido en el contexto global del juego, siendo el trabajo específico sin situación de juego menos recomendado porque después será difícil trasladarlo a la situación de juego real. De esta forma, una buena lectura de bola no tiene sentido si después no elegimos el golpe ni dirección correcta, ni un golpeo fantástico será efectivo si el momento y la posición de los contrarios no nos favorecen.
El conclusión, la lectura de bola es un aspecto fundamental del juego, que se adquiere mediante la mecanización y la experiencia, y que marca la diferencia entre los niveles de juego ya que permite al jugador llegar a la bola más cómodo y por lo tanto, tomar decisiones más adecuadas.
En próximos posts profundizaremos a analizar cómo leer bien la bola enfocándolo a situaciones reales de partido.
Un saludo y nos vemos en el siguiente post!