Las variantes del remate en el pádel
El remate es un golpe que suele ser decisivo, para bien o para mal. Es importante dominarlo para saber en qué momento ejecutarlo y cómo hacerlo para que el punto caiga de nuestro lado. En este artículo os contamos las claves de un buen remate de la mano del monitor adidas Álvaro Raposo.
Es el golpe que cualquier jugador sueña con dominar, porque permite poner toda la potencia que tenemos en el brazo a nuestro servicio. Sin embargo, siendo el tiro con el que más puntos queremos ganar puede convertirse en el que más puntos nos haga perder.
El mejor rematador no es el que más despliega este golpe, sino el que mejor resultado obtiene entre los puntos ganados y los perdidos cuando lo ejecuta. Hay que tener claro que es preferible un jugador que no remate, a uno que pierda más puntos de los que gana cuando utiliza este golpe.
El remate es un golpe de ataque, y siendo más concretos, un golpe de definición. Hablamos de golpe de definición en los impactos con la bola que buscan cerrar el punto. En un remate, el objetivo es que el rival no llegue a devolverlo. Hay que distinguir entre tres variantes de remate que son el remate de potencia (o en paralelo), el remate X3 y el remate X4, ya que a pesar de tener todos una base técnica similar, poseen ciertas particularidades.
Remate de potencia (o en paralelo)
El objetivo de este remate es traer la pelota de vuelta a nuestro campo imposibilitando que el rival pueda llegar a tocarla. Por eso se hace en paralelo, porque es el recorrido más corto entre nuestra pala, la pared del fondo y nuestro lado de la pista.
Para ejecutarlo, hay que realizar un buen ajuste de pies para dejar la pelota ligeramente por delante de la cabeza. Nos colocaremos de costado y con las piernas ligeramente flexionadas. El armado será colocando la pala detrás de la cabeza, el brazo que no sujeta la pala se extenderá hacia arriba para equilibrarnos, y el peso del cuerpo recaerá sobre la pierna más atrasada.
El impacto se producirá en el punto más alto y ligeramente por delante de la cabeza, el brazo de la pala debe estar en completa extensión, el peso del cuerpo se va transfiriendo hacia el pie más adelantado a la vez que rotamos hasta colocarnos casi de frente.
El éxito del remate pasa por el momento del impacto, en el que debemos trabajar un movimiento explosivo de pronación de la mano justo en el momento de impactar a la pelota. Este gesto consiste en una rotación de 90 grados de la muñeca hacia el interior. Coordinando el movimiento de forma adecuada conseguiremos una mayor aceleración.
En el golpeo hay que buscar la parte alta de la pelota y no la de detrás. De este modo, la bola se elevará más tras el rebote con la pared del fondo. La terminación del golpe será pasando la pala por el lado del cuerpo opuesto y equilibrándonos para continuar jugando.
Una variante de este remate es la bola rápida. En ella, el remate es más plano y no buscamos la máxima elevación, sino una velocidad suficiente para que el rival no pueda llegar a devolver la bola, aunque esta no vuelva a nuestra pista.
El remate X3
El objetivo de este remate es sacar la pelota de la pista por encima del muro lateral. Se puede lograr directamente o tras hacer rebotar la bola con el muro del fondo. En ambos casos requiere una alta capacidad técnica para dirigir el golpe. La primera opción es incluso más compleja, pero si se logra es un golpe imposible de devolver. La segunda, tras rebote, requiere más potencia y da al rival la oportunidad de salir por la puerta y devolver la bola a nuestro lado de la pista.
Para ejecutarlo es recomendable utilizar una empuñadura de revés para dar mayor efecto a la pelota. El efecto jugará a tu favor en la salida de la bola de la pista. Cuanto más atrás ejecutemos este golpe, más deberemos retrasar el punto de impacto.
El remate X4
El objetivo en este remate es sacar la pelota por encima de la pared del fondo de la pista. Este golpe se ejecuta desde una posición cercana a la red, ya que debemos "picar" la pelota contra el suelo para conseguir la altura de la bola necesaria.
Lo más importante en este tipo de remate será hacer un movimiento explosivo de la mano, controlando mucho la articulación del hombro y golpeando en la parte de arriba a la pelota.
A modo de resumen y volviendo al aspecto inicial, para qué la mejora en el remate sea progresiva, es importante ser sensatos y decidir bien cuándo y desde dónde rematar. Recuerda que el objetivo es ser eficiente y que el golpe juegue a nuestro favor. Una vez tomada la decisión, a descoser la pelotita.