Tengo un plan ¿y tú?
Pasamos media vida organizando nuestro día a día, desde que nos levantamos hasta que nos acostamo, incluso dormidos, estamos “dándole vueltas” a situaciones, reuniones, tareas pendientes, colegio de los niños y “cosas, muchas cosas” que tenemos que hacer.
Nos pasamos casi todo el día “planificando cosas”, sin embargo, ¿planificamos nuestros partidos y nuestros entrenamientos de pádel?
Si jugamos al pádel para divertirnos y pasar un rato practicando deporte y relacionándonos con nuestras amistades, la respuesta es “no”. Pero ¿y cuándo jugamos y entrenamos para “ganar” e ir subiendo en la clasificación de nuestro club, escuela o Federación?
Hoy os voy a hablar sobre la importancia de una buena y correcta planificación para mejorar nuestro pádel y llegar en las mejores condiciones físicas, técnicas y mentales a los partidos importantes.
La planificación del entrenamiento psicológico se integra en el plan general de entrenamiento y se adapta a sus fases, contribuyendo así a la consecución de los mejores resultados. El aspecto mental no es un elemento del que el jugador de pádel puede prescindir, cuando compite, el entrenamiento mental se planifica en sincronía con el entrenamiento físico. La planificación del entrenamiento psicológico tiene en cuenta y se adapta, no sólo a la periodización del plan de entrenamiento, sino también a la naturaleza del deporte y a sus características específicas. Sus dos objetivos específicos son: potenciar el desarrollo personal del deportista, y maximizar el rendimiento deportivo, según las necesidades individuales del deportista.
Un programa de planificación de las destrezas mentales para el incremento del rendimiento deportivo, se elabora conforme a los tres objetivos siguientes:
- Aprender y practicar las destrezas mentales generales, útiles para optimizar el rendimiento deportivo
- Adaptar las destrezas aprendidas a la actuación deportiva en el pádel.
- Utilización de las destrezas mentales practicadas, de acuerdo con las necesidades de cada deportista, en la situación real de competición. El contenido del programa de entrenamiento mental está basado en los tres tipos de destrezas mentales: básicas, específicas e individuales propias de la competición.
Estos contenidos son secuenciales, es decir, deben ir solapados unos con otros y no aisladamente. El primer paso, conlleva el aprendizaje y práctica de las destrezas mentales generales o básicas, útiles para optimizar el rendimiento deportivo.
Estas destrezas básicas están comprendidas en 7 grupos o apartados: Técnicas de modificación de conducta, relajación, energetización, automensajes positivos, concentración, visualización y respiración. El segundo paso consiste en adaptar las destrezas mentales básicas al deporte en cuestión, en nuestro caso el pádel.
En esta fase, lo esencial es la aplicación de las técnicas psicológicas a la actuación deportiva, primero a nivel puramente mental y luego como parte de los entrenamientos y de la práctica habitual.
Por último, tenemos que conocer los puntos débiles y fuertes de cada uno de los jugadores de pádel. Las técnicas psicológicas deben ser integradas, hasta lograr practicarlas de forma automatizada, como un elemento más de la preparación general, para optimizar el rendimiento.
Estos contenidos van dirigidos a analizar las diferencias individuales entre distintos jugadores de pádel y adecuar las técnicas psicológicas a cada uno de ellos. Para ello se planificarán simulaciones de situaciones competitivas y la participación en distintas competiciones.
Así pues, es muy necesario tener un plan de entrenamientos y calendario de competición para poder “adaptar el entrenamiento” a dicho plan y llegar a las competiciones en óptimas condiciones para que nuestro rendimiento en los partidos esté lo más cercano a nuestro potencial como jugadores de pádel.
El mejor momento para planificar es ahora, cuando finaliza la temporada de competición y organizamos la “nueva temporada” o “curso deportivo”.
Recuerda, una correcta planificación te ayudará a estar más seguro, mejorar la confianza en tu juego y disfrutar de cada entrenamiento y partido de pádel.
Coge papel y lápiz y … ¡manos a la obra!. Yo ya tengo mi plan, ¿y tú?